La adolescencia es esa etapa de transición entre el/la niño/a que fuimos y las/os adultos/as que seremos.
Esta fase, a veces, puede convertirse en un tira y afloja que le duele al propio adolescente y a su entorno.
Ese dolor ante el dilema “crecer/no crecer” puede mostrarse en forma de enfados sin justificación, agresividad, gritos, faltas de respeto, tristeza, soledad, ansiedad, adicciones (juegos, alcohol, series, TV, salidas, sexo), falta de atención, cambios bruscos de humor, y un largo etc. de síntomas visibles a veces aunque no siempre.
En la Clínica Moviliza sabemos tener una buena relación con los/as jóvenes, estamos cómodos/as con su presencia porque en ese momento de crecimiento y desarrollo sabemos lo bueno que puede ser encontrar a un adulto que le escuche, le entienda y le oriente.
Puede ser fundamental para su salud integral antes de que se constituya en un adulto.
Algunas de las problemáticas que nos llegan a consulta, son:
- El rendimiento académico
- Cambios en la apariencia física
- Los amigos y el sentimiento de identidad y pertenencia al grupo
- El enamoramiento y relaciones sexuales
- Abusos sexuales
- La autoestima (timidez, vergüenza, complejos…)
- La tensión y falta de entendimiento familiar
- Afrontar un fallecimiento cercano
- Cambios de residencia
- Bullying…
- Acoso por Internet
- Consumo de sustancias (cannabis, alcohol)
- Embarazos no deseados
- Depresión
- Fobias
- Obsesiones